
Un florista nerd encuentra su oportunidad para el éxito y el romance al hallar, en una noche de luna llena, una pequeña planta antropófaga. Tanto que Seymour, su dueño, no dudará en entregar su propia sangre cuando la planta exija ser alimentada.CON APETITO Carrillo nos lleva al Nueva York de los años 50, al barrio de Skid Row, destartalado y miserable.Su personaje, a la manera del “Fausto” de Goethe, empieza a ver cumplidos sus sueños de éxito y romance al satisfacer los apetitos de su planta, pero a diferencia del clásico alemán, no se trata de un erudito romántico quien negocia con el diablo, sino un incomprendido nerd. “Hoy, mucha gente quisiera ser Seymour. Vivimos en tiempos en que el nerd, los geeks o los hipsters están de moda. Pero la verdad, si eres auténtico y tus gustos son muy específicos, siempre serás considerado un bicho raro”, añade el director.

0 comentarios:
Publicar un comentario